El Conflicto Ambiental en Tulum
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha tomado una postura firme al negarle los permisos ambientales a Cementos de México (Cemex) para llevar a cabo un proyecto en la selva de Tulum, Quintana Roo. Este proyecto, conocido como “sascabera”, implica la construcción de un banco de materiales con trituradora y planta de cribado para la explotación de piedra caliza. La negativa se basa en que el terreno donde se planea desarrollar el proyecto está cubierto de vegetación forestal, lo cual requiere una autorización federal para cambiar su uso de suelo.
Denuncias de Greenpeace y la Expansión de Bancos de Materiales
La decisión de Semarnat llega tras una denuncia previa realizada por la organización ambientalista Greenpeace el 7 de julio. La organización alertó sobre la concesión de numerosos permisos para la instalación de nuevos bancos de material pétreo en la selva de Quintana Roo. Greenpeace argumenta que estos nuevos bancos de material, como los que operó previamente la trasnacional Vulcan Materials en Playa del Carmen durante más de tres décadas, están replicando un modelo depredador que causa graves daños ambientales.
Permisos del Ejército y la Falta de Control
Si bien Semarnat negó los permisos a Cemex, la organización ambientalista también reveló que la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) ha otorgado una treintena más de autorizaciones para nuevos bancos de material en la selva quintanarroense. Esta situación genera preocupación, ya que Greenpeace denuncia que el Ejército está llevando a cabo la explotación del subsuelo sin contar con los permisos adecuados. Este escenario se asemeja al que se vivió con el proyecto Tren Maya, donde Semarnat otorgó “permisos temporales” que permitieron la devastación de áreas y posteriormente se tramitaron las autorizaciones ambientales.
El Modelo de Explotación y sus Consecuencias
La práctica de construir estos “sascaberas” implica la remoción de árboles mediante trascobos y el uso de dinamita para fragmentar las rocas. Este proceso no solo destruye la vegetación y los ecosistemas, sino que también impacta negativamente en la biodiversidad local, la calidad del suelo y el agua, además de generar sedimentación que afecta a los cuerpos de agua cercanos. La organización ambientalista denuncia que este modelo, impulsado por empresas como Cemex y Vulcan Materials, está causando una pérdida acelerada de la selva maya.
Preguntas y Respuestas Clave
- ¿Por qué Semarnat negó los permisos a Cemex? La negativa se basa en que el terreno donde planean construir el proyecto está cubierto de vegetación forestal, lo cual requiere una autorización federal.
- ¿Qué otros permisos ha otorgado la Secretaría de la Defensa Nacional? Se han otorgado al menos treinta más de autorizaciones para nuevos bancos de material en la selva quintanarroense.
- ¿Cómo funciona el proceso de construcción de estos bancos de material? Implica la remoción de árboles mediante trascobos y el uso de dinamita para fragmentar las rocas.
- ¿Cuál es la principal preocupación de Greenpeace? La pérdida acelerada de la selva maya debido a este modelo de explotación.