A pesar de los desafíos arancelarios de Estados Unidos y un entorno regulatorio cambiante, la industria minera en México sigue atrayendo inversiones significativas. Un ejemplo reciente es la adquisición de la mina Las Chispas, en Arizpe, Sonora, por parte de la empresa estadounidense Coeur Mining, con una inversión de 1,600 millones de dólares.
Reactivación de Las Chispas y Generación de Empleos
“Esta compra es sensacional. Las Chispas es una mina polimetálica, principalmente de plata, que ya estaba en una fase de aletargamiento. Con esta inversión se reactivará su desarrollo y generará 1,000 empleos directos, el 99% ocupados por mexicanos, además de mantener las operaciones con energía solar”, afirmó Raúl García Reimbert, del Colegio de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México.
Expansión de Inversiones Mineras en México
En el marco de la segunda entrega del Sello WIM de Igualdad, Equidad e Inclusión en los Centros de Trabajo, 2025, organizada por Mujeres WIM México, García Reimbert destacó que Zacatecas, Chihuahua, Sinaloa y Guerrero también son receptores de inversiones mineras.
- Zacatecas alberga minas como Peñasquito y Fresnillo, considerada la joya de la plata del mundo.
- Chihuahua cuenta con proyectos como Palmarejo que también han atraído inversiones.
- Guerrero espera el desarrollo de nuevos yacimientos.
“Todos los estados mineros están viendo un crecimiento gradual, y esto es solo el comienzo”, aseguró el experto.
Avances Regulatorios y Futuras Inversiones
Rubén del Pozo, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas Metalurgistas y Geólogos de México, comentó que “la ley minera anterior era bastante dura, pero se ha avanzado mucho. Las autoridades están en contacto permanente con la industria, con visitas a proyectos en exploración, unidades mineras y centros de investigación”.
Además, agregó que se espera que para mediados de año se resuelvan los temas pendientes del marco regulatorio.
Compromiso de Inversión a Futuro
Las empresas afiliadas a la Camimex están listas para invertir más de 12,000 millones de dólares en los próximos dos años, siempre y cuando se mantenga la claridad regulatoria.