Nissan Motor está evaluando trasladar parte de su producción nacional destinada a Estados Unidos a este país, según informó el diario Nikkei. Esta medida surge en respuesta a los aranceles comerciales impuestos por el presidente Donald Trump.
Nissan planea reducir la producción en su fábrica de Fukuoka, Japón, y trasladar parte de la fabricación de SUV Rogue a Estados Unidos para mitigar el impacto de los aranceles.
La automotriz japonesa ahora mantendrá dos turnos de producción del SUV Rogue en su planta de Smyrna, Tennessee. En enero, Nissan anunció que pondría fin a uno de los dos turnos este mes.
Nissan vendió unas 920,000 unidades en Estados Unidos el año pasado, del cual aproximadamente el 16% se exportaron desde Japón. El cambio de producción podría afectar a los negocios de los proveedores locales.
Impacto en SUV Infiniti
Nissan también dijo que no aceptará nuevos pedidos de dos SUV Infiniti fabricados en México para el mercado estadounidense, debido a los aranceles automotores impuestos por Trump.
- Modelos Afectados: SUV Infiniti QX50 y QX55
- Planta de Producción: COMPAS, en asociación con Mercedes-Benz en México
- Producción Continuará: Para modelos vendidos en otros mercados
No está claro qué parte de la producción se destinará a otros mercados, aunque hasta ahora los dos modelos de Infiniti solo se han exportado desde México a Estados Unidos.
Nissan ha tenido problemas en Estados Unidos debido al envejecimiento de su gama y la falta de modelos híbridos. La empresa es particularmente vulnerable a los nuevos aranceles, ya que exporta el mayor número de vehículos desde México a Estados Unidos entre las automotrices japonesas.
Estos problemas han llevado a Nissan a recortar tres veces sus previsiones de beneficios y a ver su deuda rebajada a la categoría de “basura”. Su nuevo presidente ejecutivo, Iván Espinosa, se ha comprometido a reducir drásticamente el tiempo necesario para desarrollar nuevos vehículos.