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Web Editor

Parece haber un retroceso en la sostenibilidad empresarial

En las últimas semanas, hemos observado varios cambios que sugieren una posible desaceleración en el movimiento hacia la sostenibilidad corporativa. Algunas empresas estadounidenses, como Pepsi, Disney, Walmart y McDonald’s, han revisado sus políticas de diversidad e inclusión (DEI). Además, el fondo de inversiones Black Rock y entidades bancarias como JPMorgan, Citigroup o Bank of America han moderado su apoyo a los criterios ESG. La reciente revisión de la Corporate Sustainability Reporting Directive (CSRD), que exige a las empresas operativas en la UE revelar sus impactos ambientales y sociales, ha sido recibida con escepticismo por algunas partes interesadas.

Acciones regulatorias

  • Suspensión de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (Foreign Corrupt Practices Act): El presidente Trump ha decidido suspender temporalmente la aplicación de esta ley, que fue un hito importante en el movimiento de la ética empresarial.

Interpretaciones y críticas

Estos cambios han llevado a cuestionamientos sobre el estado actual de la sostenibilidad. Sin embargo, no es necesariamente una tendencia hacia la desaparición. Algunas críticas a las regulaciones y la Agenda 2030 de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) pueden responder a problemas reales, como el greenwashing o regulaciones excesivamente complejas.

El camino hacia la sostenibilidad genuina

A pesar de los desafíos actuales, la sostenibilidad podría estar entrando en una fase de madurez. Con vientos menos favorables, las empresas que realmente creen en la sostenibilidad como un pilar estratégico y ético podrán distinguirse aquellas que adoptaron medidas por presión regulatoria o conveniencia.

El futuro: sostenibilidad basada en convicciones

A medida que los incentivos económicos y la regulación se reducen, la convicción se convierte en la clave para la sostenibilidad empresarial. Las empresas que comprendan el valor de ser sostenibles y éticas por su propia supervivencia y el bienestar del planeta tendrán una ventaja competitiva.

Aunque los tiempos actuales puedan parecer desafiantes, pueden ser los mejores para la sostenibilidad genuina. En el futuro, podríamos mirar hacia atrás y afirmar: “La sostenibilidad era tan importante que ni siquiera las adversidades políticas lograron detenerla.”