El Impacto de la Tecnología y la Emergencia de Nuevos Riesgos Laborales
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advierte sobre los desafíos que plantea la creciente presencia de algoritmos en el mundo laboral. Si bien la tecnología ofrece potencial para mejorar la seguridad y eficiencia, también está impulsando nuevos riesgos como la intensificación del trabajo, la vigilancia constante, la fatiga digital y el estrés derivado de la presión algorítmica. Esta gestión algorítmica ya está presente en millones de empleos, desde repartidores de plataformas hasta operadores en fábricas automatizadas, y amenaza con borrar la empatía y la dignidad del trabajo.
En México, por ejemplo, más de 650,000 personas dependen de algoritmos para asignar tareas y controlar tiempos en plataformas de reparto y viajes. Pero este número es solo la punta del iceberg, ya que miles más trabajan en empleos formales donde sus tareas diarias también son gestionadas por algoritmos, abarcando sectores como atención al cliente, transporte, logística y banca.
Sin embargo, lo que a menudo se presenta como eficiencia algorítmica puede ocultar costos humanos significativos. Los trabajadores, sujetos a jornadas extendidas y supervisión constante, ven recompensados sus esfuerzos con ingresos que no siempre compensan el esfuerzo realizado.
El informe de la OIT identifica riesgos adicionales, como problemas musculoesqueléticos por ritmos acelerados, trastornos de sueño, fatiga visual provocada por interfaces digitales y pérdida del equilibrio ergonómico en el teletrabajo. Además, se ha identificado una nueva forma de agotamiento psicológico: el tecnoestrés, producto de la interacción permanente con dispositivos tecnológicos.
En esencia, la tecnología debería liberar a las personas de tareas arduas y peligrosas, pero sin una regulación adecuada, el clima laboral puede deteriorarse, reflejándose en la baja autonomía y las sobrecargas de trabajo.
El Gran Dilema: ¿Quién Asume la Responsabilidad?
Uno de los grandes dilemas éticos que plantea este nuevo escenario es quién asume la responsabilidad en un entorno donde las decisiones laborales ya no son tomadas por supervisores humanos, sino por sistemas automatizados. Si un trabajador sufre un accidente o un desgaste crónico debido a que el algoritmo intensificó su carga laboral, ¿quién responde? ¿La empresa? ¿El desarrollador del software? ¿El propio trabajador?
En México, la reciente reforma que incluye en la Ley Federal del Trabajo a los choferes y repartidores de apps es un primer paso importante, pues reconoce la existencia de una relación de subordinación que antes era invisible en la normatividad y obliga a las plataformas a difundir sus políticas algorítmicas. Pero es solo el comienzo de un largo camino.
La regulación del trabajo en plataformas y de la gestión algorítmica debe garantizar principios fundamentales: transparencia en los algoritmos, derecho a la desconexión (para que los trabajadores puedan tomarse un respiro y desconectarse del trabajo), derecho a la apelación de decisiones automatizadas (para que los trabajadores puedan cuestionar las decisiones tomadas por algoritmos) y participación de los trabajadores en el diseño de las tecnologías que los afectan.
Preguntas y Respuestas Clave
- ¿Qué es la gestión algorítmica? Es el uso de algoritmos para dirigir y controlar el trabajo, reemplazando la supervisión humana tradicional.
- ¿Cuáles son los riesgos asociados? Intensificación del trabajo, vigilancia constante, fatiga digital, tecnoestrés, problemas musculoesqueléticos, trastornos de sueño y pérdida del equilibrio ergonómico.
- ¿Quién debe asumir la responsabilidad? La empresa, el desarrollador del software y el propio trabajador.
- ¿Qué se necesita para regular este nuevo entorno laboral? Transparencia en los algoritmos, derecho a la desconexión, derecho a la apelación de decisiones automatizadas y participación de los trabajadores en el diseño de las tecnologías.
- ¿Qué significa la “fatiga digital”? Es el agotamiento físico y mental causado por el uso excesivo de dispositivos tecnológicos.
- ¿Por qué es importante la transparencia en los algoritmos? Para que los trabajadores comprendan cómo se toman las decisiones y puedan cuestionarlas si son injustas o perjudiciales.
