El Impacto del Estrés Laboral en México
En un contexto donde más de la mitad de la población económicamente activa en México se desempeña en la informalidad, la salud laboral se encuentra en condiciones críticas. El estrés laboral es un problema cada vez más presente entre la población trabajadora en México y genera afectaciones físicas y emocionales que deterioran la calidad de vida, advirtió María del Rosario Silva Arciniega, profesora de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM. Este problema se agrava por la alta prevalencia del trabajo informal, donde las condiciones laborales suelen ser precarias y la protección social es limitada.
Causas del Estrés Laboral
El estrés laboral en México se origina por una variedad de factores interrelacionados. Entre ellos destacan:
- Sobrecarga de tareas: La exigencia de cumplir con plazos ajustados y un volumen excesivo de trabajo, a menudo sin la posibilidad de delegar o priorizar adecuadamente.
- Condiciones laborales deficientes: Entornos de trabajo inseguros, insalubres o con instalaciones inadecuadas.
- Conflictos interpersonales: Relaciones tensas con compañeros de trabajo o superiores, caracterizadas por la hostilidad, el acoso laboral o la falta de comunicación efectiva.
- Inseguridad en el empleo: La incertidumbre sobre la continuidad del trabajo, los despidos injustos o la falta de estabilidad laboral.
- Falta de claridad en los roles: La ambigüedad o la falta de definición de las responsabilidades, lo que genera confusión y estrés.
- Escasa o nula empatía por parte de superiores jerárquicos: Un ambiente laboral donde los jefes adoptan actitudes controladoras, excluyentes o desconsideradas hacia las necesidades y preocupaciones de los empleados.
Consecuencias del Estrés Laboral
Las consecuencias del estrés se manifiestan en dos niveles:
- En lo físico: Se observan padecimientos como gastritis, colitis, laringitis, accidentes laborales o ausencias frecuentes por enfermedad. El estrés crónico puede debilitar el sistema inmunológico, haciendo a los trabajadores más vulnerables a infecciones y enfermedades.
- En lo emocional: Se presentan alteraciones del estado de ánimo, trastornos psicosomáticos (como dolores de cabeza o problemas digestivos), problemas de personalidad que afectan el bienestar mental, y dificultades para relacionarse con los demás.
En México, estas manifestaciones se han vuelto comunes. La población vive con malestares constantes, como dolores de estómago, de cabeza, mareos y desequilibrios emocionales que impiden el descanso pleno. La falta de acceso a derechos básicos, como la seguridad social y un salario digno, especialmente en el sector informal, exacerba esta situación.
Recomendaciones y Reflexiones para Combatir el Estrés Laboral
Frente a este panorama, Silva Arciniega plantea que es posible revertir el estrés laboral mediante condiciones que favorezcan un entorno sano y motivador. Un trabajador feliz necesita un empleo que sea estable, gratificante y alineado con sus valores; además de contar con un salario justo y relaciones armoniosas con sus colegas.
“El trabajo no debe ser visto como una carga”, señala. Si las condiciones laborales son positivas, las personas estarán más satisfechas, se sentirán motivadas, tendrán espacio para la creatividad y desarrollarán un vínculo saludable con su actividad profesional. Es fundamental promover una cultura laboral que valore el bienestar de los empleados y fomente un ambiente de respeto, confianza y colaboración.
Además, la especialista exhorta a preservar la autoestima, el autoconcepto y la identidad personal en el entorno laboral. Es importante recordar que cada persona tiene valor, dignidad y derechos, independientemente de su puesto o salario. El estrés laboral no debe socavar la confianza en uno mismo ni el sentido de pertenencia a una comunidad.
Conocimiento y Defensa de los Derechos Laborales
Es crucial que los trabajadores conozcan y ejerzan sus derechos humanos laborales, como los establecidos en el artículo 123 de la Constitución mexicana (trabajo digno, salario justo, seguridad social, derecho al descanso, entre otros). La educación y la información son herramientas poderosas para combatir la explotación laboral y promover una cultura del respeto a los derechos de todos los trabajadores.
