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Condenar la Violencia: ¿Es Antisemita o Solo una Crítica Justa?

La Devastación en Gaza y las Responsabilidades Clave

Desde el 7 de octubre de 2023, la situación en Gaza se ha convertido en una catástrofe humanitaria sin precedentes. Con más de 54,000 palestinos muertos –más de 16,000 de ellos menores– y más de 123,000 heridos, la franja se ha transformado en una zona prácticamente inhabitable. Este conflicto, que se inició con el brutal ataque de Hamás y la posterior respuesta militar israelí liderada por Benjamín Netanyahu, no tiene una dirección clara ni objetivos definidos. La complejidad moral de la situación exige una mirada crítica y diferenciada, evitando caer en simplificaciones que puedan legitimar la violencia.

El Contexto de la Crisis

La escalada del conflicto se debe, en gran medida, al ataque sorpresa perpetrado por Hamás el 7 de octubre. En ese día, Hamás asesinó a 1,139 personas en Israel, incluyendo 71 extranjeros, y secuestró a más de 250 individuos. Si bien este ataque fue inaceptable y debe ser condenado, no justifica la respuesta militar israelí que ha causado una devastación masiva en Gaza. Hamás, además de perpetrar actos violentos, mantiene un régimen autoritario y obstaculiza las aspiraciones del pueblo palestino hacia la autodeterminación.

Críticas a Hamás y Netanyahu

La situación no puede ser abordada con una visión simplista de “buenos” y “malos”. El ex primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha denunciado la campaña en Gaza como una “guerra sin propósito”, calificándola de cruel y criminal. Asimismo, el líder opositor Yair Golan ha argumentado que “un país cuerdo no mata bebés por afición”. Estas declaraciones revelan una profunda preocupación sobre la dirección que está tomando el conflicto y las consecuencias de las políticas implementadas.

También se han escuchado críticas hacia Netanyahu, con declaraciones como las del exdiputado Moshe Feiglin –“cada niño en Gaza es el enemigo”— o las del ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, que presume querer “destruir todo”. Estas expresiones se consideran extremistas y se alegan de la realidad del sentimiento general en Israel. Además, los soldados israelíes han sufrido al menos 407 muertes en Gaza desde el inicio de la invasión, y el total de bajas en las fuerzas de seguridad de Israel supera las 850. Estas muertes son una consecuencia directa de la estrategia y decisiones tomadas por Netanyahu y su coalición ultraderechista, que inició una guerra sin una estrategia clara.

Represión en Estados Unidos

La situación no se limita al conflicto entre Israel y Palestina. En Estados Unidos, se ha observado una creciente represión contra aquellos que protestan por la situación en Gaza. Miles de estudiantes y activistas han sido detenidos, amenazados o silenciados bajo una definición oportunista de antisemitismo. Ciudadanos extranjeros también han sido deportados, lo que genera preocupación sobre la libertad de expresión y la posibilidad de utilizar el concepto de antisemitismo para silenciar voces críticas.

El Papel de Trump

Además, el expresidente Donald Trump ha prometido “acabar con las guerras de Gaza y Ucrania en 24 horas” y, hasta el momento, se ha centrado en posar para las cámaras. Su demagogia y falta de acción son consideradas peligrosas, alimentando la inestabilidad global.

La Importancia de la Claridad y la Distinción

Es fundamental evitar caer en una lógica de “equidistancia” que implica tratar con la misma gravedad a todas las partes involucradas. Condenar la violencia de Hamás y criticar las políticas de Netanyahu no son actos de odio ni de rechazo a Israel. La paz no llegará si se sigue confundiendo justicia con propaganda, y la crítica es fundamental para evitar perpetuar ciclos de violencia. Defender la dignidad palestina no implica apoyar a Hamás, y rechazar la política de Netanyahu no equivale a rechazar a Israel. Es imperativo mantener claridad para no traicionar a las víctimas y avanzar hacia una solución justa y duradera.

Preguntas y Respuestas Clave

  • ¿Es correcto condenar a Hamás?
  • Sí, debido a sus acciones violentas, su régimen autoritario y su obstaculización de las aspiraciones del pueblo palestino.
  • ¿Es correcto criticar a Netanyahu?
  • Sí, debido a la estrategia militar que ha implementado y las consecuencias de esta en Gaza.
  • ¿Es posible defender a Israel y condenar a Hamás al mismo tiempo?
  • Sí, es posible distinguir entre las acciones de una organización y la defensa de un país.
  • ¿Por qué es importante evitar la “equidistancia”?
  • Porque la equidistancia puede diluir la gravedad de la situación y legitimar actos violentos.

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