Hace cinco años se declaró oficialmente la emergencia sanitaria de Covid-19 en México. La incertidumbre y la pérdida de vidas generaron efectos físicos y mentales que también llegaron a las empresas, y hasta ahora, aún se experimentan.
El Home Office y la Salud Mental
La pandemia fue probablemente el experimento más grande de home office y formas de flexibilidad en el trabajo, las cuales fueron cruciales para continuar trabajando sin arriesgar la salud. Sin embargo, la improvisación de nuevos modelos laborales trajo mayores retos en salud mental.
Programas de Bienestar en las Empresas
Erika Villavicencio Ayub, directora de DserOrganizacional para Latam, destaca que la pandemia fue un parteaguas que trajo grandes cambios tanto positivos como negativos, especialmente en el tema de la salud mental. Muchas organizaciones han implementado programas en favor de la salud mental a raíz de la pandemia.
Desafíos Persistentes
El informe Tendencias del Entorno Laboral en México 2024 revela que el 70% de las personas identifica el estrés laboral como el problema más común, seguido de la ansiedad que afecta al 31% de los colaboradores. Jorge Mérida, socio creativo de la firma ADN Wellbeing, menciona que la pandemia obligó al mundo laboral a adaptarse a nuevas dinámicas y ritmos de trabajo.
Lo Negativo que Dejó la Pandemia
A pesar de ser más conscientes sobre la importancia de la salud mental, persisten retos. La pandemia también desencadenó una pérdida en la habilidad de socializar debido al aislamiento. Erika Villavicencio reconoce que tras la pandemia se desencadenaron diferentes trastornos de salud mental.
Retos Futuros
El principal reto es responder a las nuevas expectativas y necesidades actuales. Jorge Mérida resalta que las empresas deben materializar esto en protocolos, programas y certificaciones que impacten positivamente tanto en el bienestar mental de las personas como en la rentabilidad de las empresas.