Durante más de medio siglo, México se especializó en vender a Estados Unidos, primero materias primas y productos agropecuarios, luego manufacturas. El TLCAN consolidó este modelo.
Aunque el plan de Donald Trump de imponer un arancel del 25% a las exportaciones mexicanas pone en jaque al país, ya que el 83% de estas exportaciones van a EU, la diversificación de mercados ahora es una urgencia.
Efectos de los aranceles
- Pérdidas económicas: El arancel del 25% implicará pérdidas de 120,000 millones de dólares en exportaciones.
- Incertidumbre y problemas fiscales: Intensificará la incertidumbre sobre el T-MEC entre inversionistas y agravará los problemas fiscales del gobierno ante la caída de ingresos.
- Presiones inflacionarias y crecimiento económico: Incluso las proyecciones más optimistas advierten que el dólar podría superar los 22 pesos al entrar en vigor, lo que intensificará las presiones inflacionarias, erosionará el poder adquisitivo de millones de mexicanos y frenará el crecimiento económico.
Otro error estratégico: dependencia de China
En 2024, México importó bienes por más de 130,000 millones de dólares desde China, convirtiéndolo en su segundo socio comercial. Si Trump intensifica su guerra comercial con ese país, México quedará atrapado en medio.
Necesidad de diversificación
México tiene una base legal para diversificar sus exportaciones: 14 tratados de libre comercio con 52 países, 30 acuerdos de protección recíproca de inversiones y 9 convenios via ALADI. Sin embargo, falta aprovecharla.
Una estrategia realista de diversificación debería consolidar alianzas existentes, como con la Unión Europea, y facilitar cadenas logísticas en el Pacífico. En el mediano plazo, la diversificación tomará años, pero es crucial reducir la dependencia de EU a un 70% en una década.
Conclusión
México apostó a una sola carta y ahora enfrentará las consecuencias. El reto de Claudia Sheinbaum no es solo lidiar con Trump, sino reparar décadas de negligencia económica y comercial.