El presidente Donald Trump anunció que Estados Unidos ha comenzado negociaciones directas con Irán sobre su programa nuclear, prevendo un encuentro “casi al más alto nivel” para el sábado.
- 2015 Acuerdo Nuclear: En 2015, Irán llegó a un acuerdo con las principales potencias occidentales (China, Rusia, Estados Unidos, Francia y Reino Unido) más Alemania para supervisar sus actividades nucleares. Este acuerdo preveía una flexibilización de sanciones a cambio de supervisión de las actividades nucleares iraníes.
- Retiro de Trump: En 2018, Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo y restableció sanciones. Irán respondió distanciándose del texto y acelerando su programa nuclear.
- Acusaciones y Negativas: Las potencias occidentales acusan a Irán de querer obtener armas atómicas, mientras que Teherán rechaza estas acusaciones argumentando que sus actividades nucleares son solo para fines civiles.
Declaración de Trump: “Tenemos una reunión muy importante el sábado y trataremos con ellos directamente”, dijo Trump a periodistas en el Despacho Oval. Añadió que si se alcanza un nuevo acuerdo, será “diferente y quizás mucho más sólido”. Sin embargo, advirtió que Irán estará “en gran peligro” si las conversaciones no prosperan.
Rechazo de Irán: El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abás Araqchi, rechazó negociar directamente con Estados Unidos, argumentando que las amenazas constantes de fuerza y posiciones contradictorias de los funcionarios estadounidenses hacen que cualquier negociación sea infructuosa.
Posicionamiento de Netanyahu: El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que el objetivo es que Irán “nunca” fabrique un arma nuclear y pidió negociaciones diplomáticas para un desmantelamiento “completo”, citando como ejemplo el caso de Libia.
Consecuencias de Fallo en Negociaciones: Ali Larijani, consejero del líder supremo de Irán, advirtió que si Estados Unidos ataca a Irán, el país tendrá “otra opción” más que dotarse de armas nucleares.
Historial de Relaciones Diplomáticas: Irán y Estados Unidos no mantienen relaciones diplomáticas desde 1980, un año después de la Revolución Islámica. Ambos países intercambian información indirectamente a través de la embajada suiza en Teherán.