a person writing on a notebook in front of a clock with a pen and paper in front of them, Andries St

Web Editor

La Reducción de Jornada Laboral: Un Desafío Gradual y con Costos para México

El 2030 es un Plazo Irreal: Expertos de la Cámara Americana de Comercio Abogan por una Implementación Gradual

La iniciativa del gobierno mexicano de reducir la jornada laboral a 40 horas para el año 2030 enfrenta un fuerte escepticismo por parte de la comunidad empresarial, especialmente las empresas extranjeras que operan en el país. Alfredo Kupfer Domínguez, presidente del comité de capital humano y asuntos laborales de la Cámara Americana de Comercio en México, advierte que este plazo es irreal y requiere una implementación gradual para evitar problemas significativos en la economía. En una entrevista con El Economista, Kupfer Domínguez explicó que las empresas extranjeras, acostumbradas a los cambios legislativos y con una visión a largo plazo de sus inversiones en México, no ven viable un cambio tan radical en un plazo tan corto.

La Cámara Americana de Comercio reconoce la importancia de avanzar hacia esquemas laborales que prioricen la salud física y mental de los trabajadores, pero considera que la reducción a 40 horas en 2030 implicaría un impacto desproporcionado en ciertos sectores de la economía. El representante empresarial señaló que el sector automotriz, por ejemplo, tendrá un plan diferente al del sector minero o hotelero, que requiere una mayor cantidad de horas y días de trabajo.

Kupfer Domínguez enfatizó que las empresas están dispuestas a adaptarse y mejorar la productividad de sus centros de labores, pero advierte que la reducción de jornada laboral implica costos significativos. Estos costos se manifestarán en nuevas contrataciones, capacitación del personal, búsqueda de nuevo talento y aumento de los costos de nómina. Además, reconoce que la implementación de una jornada laboral más corta podría requerir ajustes en el esquema de cotización ante el IMSS, dado que la flexibilidad laboral y los trabajos a tiempo parcial podrían aumentar.

Propuestas para una Implementación Exitosa

La Cámara Americana de Comercio ha propuesto diversas estrategias para facilitar la transición hacia una jornada laboral de 40 horas. Entre ellas, destacan:

* **Gradualidad:** Se propone un proceso gradual, con proyectos piloto que permitan recabar datos y evaluar los resultados en diferentes empresas y sectores antes de avanzar hacia la reducción total.
* **Flexibilidad:** Se mantiene la propuesta del artículo 59 de la Ley Federal del Trabajo, que permite distribuir la jornada laboral para facilitar el tiempo de descanso y adaptarse a las necesidades específicas de cada industria.
* **Adaptación de la Jornada Diurna y Nocturna:** Se sugiere adaptar la jornada diurna y nocturna para que la reducción a 40 horas sea aplicable en ambas.
* **Ajuste en la Cotización ante IMSS:** Se propone un ajuste en el esquema de cotización ante el IMSS para reflejar la mayor flexibilidad laboral y los trabajos a tiempo parcial.
* **Ampliación de las Horas Extras:** Se considera la posibilidad de ampliar las horas extras dobles para sectores que lo requieran.

Además, se recuerda que el artículo 63 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) establece un descanso mínimo de media hora para los trabajadores durante la jornada continua.

El Desafío de Entrar a “Terreno Desconocido”

Kupfer Domínguez reconoce que la transición hacia una jornada laboral de 40 horas representa un “terreno desconocido” para las empresas. Por esta razón, aboga por una estrategia bien planificada que incluya:

* **Proyectos Piloto:** La implementación de proyectos piloto permitirá a las empresas analizar los desafíos y oportunidades que presenta la reducción de jornada laboral en su sector específico.
* **Análisis de Datos:** La recolección y análisis de datos rigurosos son fundamentales para tomar decisiones informadas y ajustar las estrategias según los resultados obtenidos.

En resumen, la Cámara Americana de Comercio aboga por una implementación gradual y flexible de la reducción de jornada laboral, reconociendo que el éxito del proyecto depende de una planificación cuidadosa y la adaptación a las necesidades específicas de cada sector económico.