Los inversionistas latinoamericanos han comenzado a explorar opciones en el exterior para garantizar la estabilidad de su patrimonio, y los bienes raíces de Estados Unidos están emergiendo como una alternativa cada vez más atractiva. Esta tendencia se debe a la creciente preocupación por la situación económica y política en América Latina, que ha impulsado una búsqueda de mercados más seguros y con mayor potencial de crecimiento.
De acuerdo con la plataforma de inversión Dividenz, ocho de cada diez inversionistas de América Latina se encuentran muy o extremadamente preocupados por su patrimonio. Esta inquietud es comprensible, considerando la volatilidad de los mercados locales y las fluctuaciones económicas que han afectado a la región en los últimos años. La búsqueda de refugio no se limita a una sola estrategia, sino que abarca una variedad de instrumentos financieros y de inversión.