Antecedentes y la Situación Actual
La situación en Pemex está generando una seria preocupación en el sector de los proveedores petroleros. La Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (Amespac) ha emitido una advertencia contundente: si Pemex no regulariza sus pagos deudas, un número significativo de empresas asociadas a la asociación podrían verse obligadas a suspender o cerrar sus operaciones a partir de julio de este año. Esta situación se debe a una larga historia de pagos atrasados y la falta de un plan claro para liquidar los adeudos acumulados.
La Profundidad de la Deuda y sus Consecuencias
El problema es complejo y va mucho más allá de un simple retraso en los pagos. Al corte del tercer trimestre de 2024, Pemex tenía una deuda por proveedores de aproximadamente 404,000 millones de pesos. Si bien hubo una ligera reducción del 20% con respecto a los 500,000 millones registrados al cierre de 2024, la cifra sigue siendo astronómica. Además, es importante destacar que esta deuda representa un aumento de 260% en comparación con los registros de 2018, revelando una tendencia preocupante a largo plazo.
Impacto en los Proveedores
La falta de pagos por parte de Pemex está teniendo un impacto directo y tangible en las empresas asociadas a la Amespac. Según la asociación, se han visto obligados a reducir drásticamente sus actividades debido al deterioro de su flujo de caja. En muchos casos, no pueden garantizar una continuidad operativa a partir de julio de este año, lo que pone en riesgo sus empleos y la viabilidad de sus negocios. La antigüedad de algunos adeudos supera los 12 meses, lo que agrava la situación y dificulta su recuperación.
La Demanda de Amespac
Ante este panorama, la Amespac ha tomado cartas en el asunto y ha presentado una demanda formal a la Presidencia de la República, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la Secretaría de Energía y la dirección de Pemex. El objetivo principal de esta demanda es lograr una mesa de negociación que permita abordar las causas del problema y establecer soluciones viables. Los puntos clave de la demanda son:
- Reconocer y liberar la facturación de los servicios prestados y certificados en 2024.
- Garantizar la facturación regular y el pago puntual de los servicios del 2025.
- Diseñar un programa de pagos que liquide los adeudos históricos.
El Desafío de la Regularización
La regularización de los pagos a Pemex es un desafío complejo que requiere una estrategia integral. No se trata solo de emitir nuevos cheques, sino de abordar las causas subyacentes del problema. Esto implica una revisión exhaustiva de los procesos internos de Pemex, la implementación de mecanismos de control más rigurosos y una mayor transparencia en la gestión financiera. Además, es fundamental establecer un diálogo continuo con los proveedores para comprender sus necesidades y encontrar soluciones que permitan mantener el flujo de suministro a la empresa estatal.
Preguntas y Respuestas Clave
- ¿Cuál es la magnitud de la deuda que Pemex tiene con sus proveedores? La deuda actual es de aproximadamente 404,000 millones de pesos.
- ¿Cuándo se espera que los proveedores puedan verse afectados? Se prevé que las operaciones de muchos proveedores podrían suspenderse a partir de julio.
- ¿Qué ha hecho la Amespac para abordar el problema? La asociación ha presentado una demanda formal a las autoridades para lograr una mesa de negociación.
- ¿Qué se espera lograr con la mesa de negociación? Se busca un programa de pagos que liquide los adeudos históricos y garantice la facturación regular.
