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Inversión Extranjera Directa China en México: Un Análisis de la Expansión y sus Implicaciones

El Auge de la Inversión China en México: ¿Qué Significa para la Industria Automotriz?

La USITC Revela el Aumento de las Inversiones Chinas en México

La Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (USITC) ha publicado un informe que detalla el significativo aumento en la Inversión Extranjera Directa (IED) china en la industria automotriz mexicana. Este informe, titulado “Reglas de Origen Automotriz del T-MEC: Impacto Económico y Operación 2025”, revela una tendencia preocupante que podría tener implicaciones importantes para la economía mexicana y las relaciones comerciales con Estados Unidos.

Entre 2019 y 2023, México se convirtió en el cuarto lugar a nivel mundial en términos de destinos de las inversiones chinas en la industria automotriz, tras Estados Unidos, Alemania y Japón. De las 32 inversiones greenfield (nuevas inversiones, no adquisiciones ni fusiones) anunciadas por empresas chinas en México durante este período, 11 (34%) se realizaron en el año 2023. Este aumento significativo no es simplemente una expansión incremental; representa un cambio fundamental en la dinámica de la industria automotriz mexicana.

El Contexto: Evitar Aranceles y Acceder al Mercado Estadounidense

La principal motivación detrás de esta expansión es, sin duda, la posibilidad de evitar los aranceles impuestos por Estados Unidos y acceder al mercado estadounidense. El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) establece reglas de origen que pueden dificultar la calificación de los vehículos y autopartes como “de origen” mexicano si una parte significativa de su contenido proviene de China. Las empresas chinas están utilizando México como un punto estratégico para ensamblar vehículos y producir autopartes, aprovechando los bajos costos laborales en México y las reglas de origen del T-MEC.

Un representante laboral ha señalado que la creciente proporción de importaciones estadounidenses de vehículos provenientes de México que no reclaman la preferencia del T-MEC es evidencia de que las empresas chinas están aprovechando los bajos costos laborales en México, pero no están aumentando el contenido para cumplir con las reglas de origen. Esto sugiere una estrategia deliberada para evitar los aranceles estadounidenses.

Cifras Clave y Tendencias

Las importaciones mexicanas de autopartes provenientes de China han aumentado de 11,400 millones de dólares a 13,200 millones de dólares entre 2019 y 2024. Las exportaciones mexicanas de vehículos y autopartes a Estados Unidos han aumentado de 99,000 millones de dólares a casi 183,000 millones durante el mismo período. Estos datos ilustran la creciente interdependencia entre las industrias automotrices de México, Estados Unidos y China.

Además, el 35% de las inversiones anunciadas por China en México entre enero de 2023 y mayo de 2024 se centraron en la producción de vehículos eléctricos, lo que indica una apuesta estratégica por parte de las empresas chinas hacia el mercado de vehículos eléctricos en Estados Unidos.

Ventajas para México: Ubicación Estratégica y Costos Laborales

México ofrece ventajas significativas a las empresas chinas más allá de evitar aranceles. Su ubicación fronteriza con Estados Unidos facilita el transporte y la distribución de productos. México es también el séptimo mayor productor de vehículos del mundo y un importante proveedor global de autopartes. Además, cuenta con 13 acuerdos comerciales que lo convierten en una plataforma de exportación potencialmente valiosa.

Los costos laborales de manufactura en México (4.82 dólares por hora en 2020) son significativamente más bajos que los costos laborales de China (6.50 dólares por hora). Esta diferencia de costos es un factor clave que impulsa la inversión china en México.

Factores Adicionales: Covid-19 y Tensiones Geopolíticas

La Covid-19, si bien ha sido un factor disruptivo, también ha acelerado estas tendencias. Las disrupciones comerciales inducidas por la pandemia han aumentado la conciencia de los gobiernos sobre su dependencia de China y sobre la creciente vulnerabilidad de las cadenas de suministro globales a las perturbaciones. Además, las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China han contribuido a esta dinámica.