La transformación digital es más que la simple adopción de tecnologías, representa un profundo cambio estructural, cultural y estratégico en empresas, gobiernos y sociedad. Busca integrar la tecnología en todos los aspectos productivos y sociales para mejorar eficiencia, competitividad y bienestar.
Desigualdades en la transformación digital
Aunque México ha avanzado en conectividad, existen brechas significativas. La disparidad de acceso a Internet entre zonas urbanas y rurales es notoria. Mientras que en ciudades la mayoría tiene acceso, en áreas rurales el porcentaje se reduce drásticamente.
- Acceso a Internet: Según INEGI, en 2023, el 81.2% de mexicanos (97 millones) usaban Internet, principalmente vía celular. Sin embargo, la calidad de conexión varía ampliamente entre urbanas y rurales.
- Impacto en servicios: Las asimetrías en el acceso afectan la adopción de servicios digitales, limitando el acceso a educación, salud, servicios financieros y oportunidades laborales.
Obstáculos para la transformación digital
Problemas como la falta de infraestructura tecnológica adecuada, regulación obsoleta y escasez de profesionales capacitados frenan el progreso digital.
- Infraestructura: Muchas regiones carecen de redes de fibra óptica, cobertura móvil eficiente o soluciones satelitales accesibles para bajos ingresos.
- Regulación: El marco legal nacional no siempre se adapta a la velocidad de la innovación tecnológica, requiriendo actualizaciones urgentes en áreas como el espectro radioeléctrico y protección de datos.
- Talento: México enfrenta una escasez de profesionales en campos digitales, con cifras de Manpower indicando una falta de talento tecnológico del 74% para 2024.
Necesidad de un enfoque integral
La transformación digital no solo es responsabilidad privada, requiere compromiso estatal. Se necesita una política pública que combine financiamiento, regulación e incentivos para la innovación.
La transformación digital debe estar orientada al bienestar humano y desarrollo sostenible, evitando ampliar las brechas existentes y fomentando un ecosistema tecnológico inclusivo. Invertir en infraestructura, actualizar marcos legales y formar talento son clave para alcanzar este objetivo.
Conclusión
México tiene la oportunidad de aprovechar la transformación digital para construir un país más justo, competitivo e innovador. Sin embargo, solo será posible si se alinean esfuerzos del sector público, privado, académico y civil, colocando a las personas en el centro del cambio.