La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha dictaminado que las obras creadas exclusivamente por inteligencia artificial no pueden ser reconocidas como autoría, pero esto no impide el registro legal de contenido generado con IA en México, siempre y cuando exista una intervención humana demostrable. Esta situación ha generado un debate importante entre creadores, empresas tecnológicas y asesores legales, quienes buscan entender cómo navegar este nuevo panorama legal.
La sentencia de la SCJN, que establece que las obras producidas únicamente por IA deben considerarse de dominio público, ha generado una serie de preguntas y preocupaciones. El objetivo principal es entender cómo se pueden proteger los derechos de autor en un mundo donde la inteligencia artificial está desempeñando un papel cada vez más importante en el proceso creativo. Si bien la ley actual no está diseñada para abordar directamente la creación asistida por IA, los expertos sugieren que existen estrategias y mecanismos legales que pueden ser utilizados para proteger las obras generadas con la ayuda de estas herramientas.
Documentar Rigurosamente el Proceso Creativo
Uno de los consejos más importantes que ofrecen los especialistas es la necesidad de documentar exhaustivamente cómo se utilizó la inteligencia artificial en el proceso creativo. Esto implica registrar con precisión qué insumos se proporcionaron a la IA, cuál fue el grado de intervención humana y cómo se llegó al resultado final. Este nivel de detalle es crucial para demostrar la autoría y evitar posibles conflictos legales.
Por ejemplo, si una IA fue alimentada con secretos industriales o contenido previamente protegido, como imágenes o textos registrados, el resultado también podría estar protegido, siempre que se respete la legalidad y se cuente con las autorizaciones necesarias. La clave está en demostrar que el creador aportó elementos originales y significativos al proceso, más allá de simplemente seleccionar o modificar los resultados generados por la IA.
“No es lo mismo que tú alimentes a la inteligencia artificial con contenido propio, a que lo hagas con obras de otros sin su autorización. Ahí entra en juego el fair use o uso legítimo, pero hay que tener cuidado”, advierte Cruz. Este consejo subraya la importancia de distinguir entre el uso legítimo de información y la apropiación indebida de obras protegidas.
Prácticas que Pueden Poner en Riesgo los Derechos
Los especialistas también advierten sobre ciertas prácticas que podrían poner en riesgo los derechos del creador:
- Delegar completamente el proceso creativo a la IA, sin aportar valor humano.
- Utilizar contenido con derechos de autor ajenos para alimentar modelos sin autorización.
- Presentar a la IA como la autora de una obra.
Estas acciones pueden derivar en acusaciones de plagio, conflictos legales o pérdida de derechos sobre la obra. Es fundamental comprender que el valor de una obra protegida por derechos de autor no reside únicamente en su forma final, sino también en la originalidad y el esfuerzo creativo del autor.
Necesidad Urgente de Actualización Legislativa
Villanueva y Cruz coinciden en que la legislación mexicana necesita una actualización urgente. La actual Ley Federal del Derecho de Autor no contempla la participación de herramientas tecnológicas como la inteligencia artificial en la creación de obras. Esta falta de regulación ha generado confusión y ha obligado a los expertos a recurrir a interpretaciones creativas de las normas existentes.
Países como China ya han avanzado en este terreno, modificando su ley para permitir el registro de obras desarrolladas con IA. En la Unión Europea, el enfoque se centra en la criticidad del uso de la IA, mientras que en México, la prioridad regulatoria ha estado más ligada a la protección de datos personales. Sin embargo, existe unánime consenso en que es necesario abordar el tema con mayor profundidad y considerar nuevas categorías jurídicas.
“La inteligencia artificial ya está vulnerando derechos de propiedad intelectual al no discernir qué contenidos están protegidos. La regulación debe ir hacia allá”, dice Villanueva. Este argumento subraya la necesidad de una legislación que vaya más allá de las definiciones tradicionales y considere el papel específico de la IA en el proceso creativo.
El Punto de Inflexión: La Autoría Asistida por IA
Si bien la sentencia de la Suprema Corte no prohíbe el registro de obras generadas con inteligencia artificial en México, marca un punto de inflexión. Mientras no se reforme la legislación, los creadores deberán cuidar la manera en que presentan sus solicitudes y documentar exhaustivamente la participación humana en el proceso creativo. Esto implica demostrar que, si bien se utilizó una herramienta de IA, el resultado final es producto del esfuerzo y la creatividad del autor.
Preguntas y Respuestas Clave
- ¿Puede registrarse una obra generada por IA sin intervención humana? Si no hay aportación original del creador, la obra podría considerarse de dominio público.
- ¿Qué se necesita para proteger una obra generada con IA? Es fundamental documentar el proceso creativo, incluyendo los insumos proporcionados a la IA y el grado de intervención humana.
- ¿Qué pasa si se utiliza contenido con derechos de autor ajenos para alimentar la IA? Esto podría considerarse una infracción de los derechos de autor.
- ¿Cómo afecta la falta de regulación a la protección de los derechos de autor? La legislación actual no está diseñada para abordar la creación asistida por IA, lo que genera confusión y dificulta la protección de los derechos.