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Web Editor

¿Sufrimos ahora más ansiedad que nunca?

La revolución tecnológica actual es sin precedentes. A pesar de la constante compañía de la tecnología a lo largo de la historia, el ritmo acelerado de su desarrollo presenta consecuencias potencialmente perjudiciales para nuestra salud mental.

Problemas asociados a las tecnologías

La ansiedad es uno de los problemas más destacados en el uso excesivo de la tecnología, especialmente entre la juventud. Este ciclo vicioso se manifiesta cuando los síntomas ansiosos aumentan el tiempo dedicado a las redes sociales y a internet, convirtiéndolo en una estrategia de afrontamiento pasivo.

  • Ciberacoso: Con el avance en el sistema educativo, los jóvenes corren mayor riesgo de sufrir humillaciones y amenazas online. Esto se intensifica debido a la capacidad del ciberacoso para trascender los límites físicos y reforzarse anónimamente.
  • Brain rot: El consumo descontrolado de contenido irrelevante puede provocar un declive cognitivo, expresado en lapsos de memoria, dificultades de concentración y pensamiento empobrecido.

Causas emocionales de las tecnologías

Las redes sociales presentan una imagen distorsionada de la vida, llena de espejismos de perfección que afectan negativamente la autoestima.

  • Miedo al desconectar (FOMO): La necesidad constante de estar al tanto de todo lo que sucede en el entorno, principalmente a través de redes sociales y mensajería instantánea, genera una sensación de insatisfacción con la vida.
  • No estar al día: El concepto de “quedar al margen de los planes” asociado a la imposibilidad de acceder a contenidos borrados en aplicaciones como WhatsApp, se ha relacionado con una menor autoestima y un peor estado de ánimo.

Medidas para reducir el riesgo

Controlar el tiempo dedicado a las tecnologías, seguir un horario estricto y bloquear notificaciones fuera de este puede ayudar. La práctica de meditación y relajación también es efectiva para aliviar el malestar causado por los cambios en los hábitos.

Si estas medidas no son suficientes, consultar a un profesional de la salud mental puede brindar herramientas útiles para lidiar con este desafío.